AQUI VIENE LA TERCERA PARTE DE HISTCapitulo 3: Misión iniciada, proyecto en peligro... (1/3)
Narrador:
( Nota autora: el pedazito que van a leer ahora lo había separado de la conti cuando la comencé bueno, yo lo llamo "encuentro con esto" no es un titulo muy original, pero es un one-short sin continuación que ya tenía de antes y pensé que quedaría bien como... Mejor no se lo cuento lean y lo descubrirán ^^.)
(Encuentro con "eso": (no se me dan demasiado bien escoger títulos))
Los truenos retumbaban en el ambiente, la lluvia caía por los arapos rasgados que portaba la muchacha. Luego se deslizaban por sus tobillos mojados y alcanzaban su meta, el mullido barro, que más tarde formaría una rivera.
Los pasos eran firmes, cansados y propensos a sonar entre la tormera la chica corría por el espeso bosque, compuesto por abetos y pinos. Las tupidas matas se enrollaban en los miembros de esta. Inpidiendole el paso, algo que no jugaría su favor. No dejarla escapar del peligro que corría. Las inmensas telarañas solo molestaban, se le enredaban con facilidad en el cabello.
La Luna estaba alta, húmeda, parecía desde el suelo, luminosa y concordaba a la perfección con el cielo.
Los aullidos estremecedores de la manada maldita que se abrían paso a su próxima víctima. Se podían distinguir en la noche. Las garras de las elegantes manos de la manada, acompañaban al sonido de la lluvia. Rozando apenas el suelo, con la velocidad que tenían casi podían tocar las nubes grises que atormentaban el cielo. Chocando y estallando en truenos.
La inocente muchacha, seguía corriendo sin dirección alguna, asustada, canda y con una horrible idea en la cabeza. Entremeciendose de miedo mientras se abrazaba a si misma y seguía corriendo y corriendo, ensuciando sus delicados pies con el barro recién formado.
Los penetrantes ojos grises con tonos rojizo como la sangre fresca que todavía no había saciado a las enormes, oscuras y negras bestias. Miraban el rastro de la joven.
La chica inocentemente, se topó de narices, con el suelo, con toda la cara llena de barro y arañazos realizados por la breve persecución provocada por el grupo de seres o bestias malvadas según los poblados de la zona... Como la chica no temía otra opción que descontroladamente otra vez, lo hizo, con las pocas fuerzas que les quedaban se sostuvo en pie, y seguí por su camino aleatorio de huida.
Las persecución finalizó, la chica algo indefensa se encontraba en una mala situación. Unas rocas le impedían el paso... Llovía, peligro y cansancio, que más quería la chica, todo era demasiado malo. Demasiados problemas para ella, asustada y rendida, acepta su destino. Cerrando los ojos creyendo que sería la última vez. Unos pasos agudos, firmes y horrorosos para ella, indicaban que la manada maldita se aproximaba...
La chica seguía acurrucada contra la pared de roca, con los ojos cerrados y aterrorizada de pies a cabeza. Un miembro del grupo se aventuró a examinarla muy veloz. la muchacha tenía el aliento de el animal en la cara, sus músculos no la obedecían. Ella ordenaba quedarse quieta. Pero su mano se extendió paso a paso hacía el lomo de la criatura. Si, habían matado a toda su tribu; Si,la habían perseguido durante horas. Pero a pesar de eso, ella seguía pensando que eran seres inofensivos, pero si los provocaban se defenderían, como cualquier animal pacífico.
Los ojos del animal se abrieron dejando al descubierto sus brillantes pupilas negras. El individuo negro y gris hizo un intento de zafarse de la caricia Pero al final la bestia cedió a su acto y mostró algo de interés en la muestra de cariño y respeto...
Maryel despertó sobresaltada, llena de energía hiperventilando, sudando, ese sueño fue bastante raro, unos ruidos provenían de un callejón, seguramente sin salida posible. Como podía haber sido tan torpe de haberse desmayado, dormido o lo que fuese en mitad de la noche... Hay esta castaña...
La joven reaccionó rápido y se dispuso a mirar quien era lo que estaba allí, para su sorpresa ya conocía quienes eran Drew de la Rousse, Ash Ketchum y Kenny, había visto sus nombres en el pequeño papel de la misión, decidió dormirles con una especie de ondas que creaba un apatito de color negro con una luz roja. Unas ondas empezaron a salir del trasto ese, Maryel sonrió diabolica y cogío una carretilla...
Al día siguiente...
CONTUNUARÁ! ^^ gracias por leerme, espero que les aya gustado como siempre, un saludo Dew.
ORIETIS:)
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